3 nov 2011

Y volviendo, vuelvo a ser yo...


"Puede ser todo una puesta en escena, ¿pero alguien puede denostar a esta altura del siglo el valor de una puesta en escena?" Marta Dillon
Página 12, Reparaciones

Yo me identifico con la Cristina que apunta con el dedo y me identifico con los insultos de las que es objeto, y con la mujer que lleva todo sobre sus espaldas... y que es madre, y que es esposa, y que es viuda y que es mujer... La que llora y la que grita, a esa que llaman yegua, loca ¡loca, siempre loca! Una y mil veces su cara es mi bandera y mi puesta en escena.

Miremos las caras de los hombres detractores, quisieran meternos a las yeguas debajo de ellos (aunque se finja el orgasmo), miremos las mujeres detractoras, mujeres argumentando desde su más rústico mandato (y otras, pobres, que a pesar de sus palabras perfumadas, no han sabido descubrir la belleza que cada mujer tiene en sí...)

Me gusta que use polleras, porque las tiene bien puestas, porque demuestra que no hace falta masculinizarse ni convertirse en "ellos" para llevar cualquier rienda. Me gusta Cristina Fernández de Kirchner porque es una mujer de su tiempo, como yo, como tú y como todas las brujas con las que comparto mi tiempo...

Mujeres a las que no les tiembla el pulso, pero tampoco les faltan las caricias. Eso no es feminismo, eso es reconocerse hoy como mujer, sin pedir disculpas porque se avanza, sólo avanzar y que como a Eva, el viento le despeine el cabello.


 
Lu*